“Wine regions are resilient places” (las regiones vinícolas son lugares resilientes). Así comienza el sexto reportaje de Tim Atkin sobre Rioja, en el que el escritor de vinos realiza un análisis en profundidad, de una forma reflexiva, critica, realista y también motivadora de la situación en Rioja.

En un extenso informe de 187 páginas, Atkin sigue reivindicando la heterogeneidad de Rioja, basada en la caracterización de suelos y climas muy diferenciados, de los que emergen grandes vinos. Así como la necesidad de trasladar al mercado más información respecto a esa diversidad, como lo hacen otras grandes regiones vitícolas del mundo y como espera el segmento más profesional del mundo del vino internacional.

Además de la difícil coyuntura que estamos viviendo como consecuencia de la pandemia, ese es el principal escollo que sortear: las escasas, por no decir nulas, intenciones mostradas por el Consejo Regulador por promocionar la diversidad del terroir en Rioja y así convertirlo en motor de cambio y generador de valor para el conjunto.

Pequeños o medianos, proyectos basados en la calidad del terroir, familias, gente joven muy motivada y preparada, dispuesta a generar y desarrollar un proyecto de valor, que además mantenga viva la economía, el paisaje y la vida de nuestros pueblos, deben de tener más peso en las decisiones que se toman, algo tan sencillo como poder decidir sobre su propio futuro y que no siempre decidan los mismos. “One bodega one vote?”, se pregunta Atkin en este amplio informe que os invitamos a leer.

En cuanto a la clasificación y puntuación de nuestros vinos seguimos en ese “Second Growths”, por sexto año consecutivo, lo que supone un pequeño impulso a seguir mejorando. Una posición que avala el intenso trabajo que estamos desarrollando en nuestra viticultura y que se ve reflejado en nuestros vinos.

Debido a las limitaciones de vinos por bodega en consecuencia de la pandemia, estos son los vinos que hemos presentado a la cata, realizada en Londres a finales de 2020.

 

Gloria de Ostatu

2015 Gloria de Ostatu (96 puntos) (14.5 %)

Gloria es un gran vino elaborado en una parcela singular, ubicada en Samaniego y plantada en 1923. Envejecido exclusivamente en roble francés, es un vino ambicioso y que muestra la concentración y profundidad de una añada templada en la zona.

De color profundo, con gran potencial, equilibrio y potentes notas balsámicas.

 

2016 Laderas de Ostatu (95 puntos) (14.5 %)

Laderas es un vino elaborado en la finca “El Portillo”, clasificado como viñedo singular, en un suelo de un marcado carácter calizo y con una altitud de 650 metros.

De este entorno nace un impresionante vino elaborado con tempranillo y 5 % viura, agradables notas dulces y tostados sugerentes, con un sabroso carácter de frutas negras.

 

Lore de Ostatu

2018 Lore de Ostatu (94 puntos) (13 %)

Las condiciones climáticas del año 2018 permitió obtener una gran vendimia para los vinos blancos. Lore de Ostatu se ha elaborado con viura y malvasía, permitiendo un vino con equilibrio y lleno de elegancia. De agradable textura y sugerentes tostados, destacan sus aromas de pera, perlas cítricas y minerales con un final refrescante.

 

Tinto Reserva Ostatu

2015 Ostatu Reserva (93 puntos) (14.5 %)

Impresionante Reserva elaborado con tempranillo de viñedos de más de 50 años entre Samaniego y Ábalos. Vino denso, refrescante y con una gran combinación de tonos torrefactos, intensa fruta negra y muy buena acidez.

 

2015 Ostatu Gran Reserva (93 puntos) (14.5 %)

Un vino que muestra la gran concentración y potencia de muchos vinos de la añada 2015, un joven Gran Reserva que requiere paciencia por su gran capacidad de envejecimiento. Elaborado con tempranillo y un 15 % de graciano que aporta viveza y brío. Este Gran Reserva es un vino intenso, compacto y bien estructurado con notas variadas de fruta negra, perfumadas notas tostadas y taninos maduros.

 

2016 Selección de Ostatu (93 puntos) (13.5 %)

Este vino combina tempranillo y un 8 % de graciano, de las zonas altas de Samaniego y las zonas más expuestas y cercanas a la Sierra de Cantabria, entorno a 600 metros.

Es un vino fresco, con impresionante estructura y profundidad, tostados elegantes, afinados y vibrantes taninos acompañados de aromas de fruta negra madura y regaliz.

 

2018 Ostatu Crianza VM (90 puntos) (14 %)

Todavía joven y recién embotellado, en el momento de la cata. El Crianza de Ostatu se ha elaborado con Tempranillo y un 10 % entre graciano, garnacha y mazuelo.

Madurado y concentrado, con uvas procedentes de viñedos altos de Samaniego de una añada fresca. Intensa fruta negra acompañada de sutiles tostados.

 

Estas son las valoraciones de Atkin en la cata de nuestros vinos. Y tú, ¿qué opinas?