La tradición familiar y una materia prima de categoría se juntan en los fogones del Sutargi Jatetxea, un restaurante ubicado en Ondarroa, muy cerca del puerto de esta localidad costera.
Quizás esa proximidad al Cantábrico y el respeto por los productos que éste ofrece, además de una cocina honesta y un trato cercano, sean lo que le han convertido en una referencia culinaria de la región. Basta con echar un vistazo a las opiniones que los usuarios dejan en las aplicaciones gastronómicas más conocidas para darse cuenta de ello.
Marisco, pintxos, pescado, carnes, conservas… Ya sea en su bar o en el restaurante, es complicado encontrar críticas a cualquiera de sus platos. Pero si tuviésemos que destacar uno que todo comensal debiera degustar, lo tenemos claro: su conocida y galardonada Merluza a la Ondarresa.
Sutargi Jatetxea es parada obligatoria para los amantes del pescado
Lleváis muchísimos años dando de comer a vecinos y visitantes de Ondarroa y desde 1999 bajo el nombre actual de Sutargi Jatetxea. ¿Qué ofrecéis para manteneros durante tanto tiempo como un restaurante de parada obligatoria de este enclave costero?
La verdad es que somos un equipo en el que nos gusta superarnos cada día. En Sutargi nos preocupamos por los clientes y nos gusta sorprender a los comensales, pero siempre ofreciéndoles productos de garantía.
¿Cómo influye el hecho de que seáis una familia con tradición por la cocina y la gastronomía?
En Sutargi tanto la familia como el resto de trabajadores ofrecen mucha cercanía al cliente. De hecho, esa cercanía es el alma del restaurante y lo que hace que los comensales se sientan cómodos.
Trip Advisor, El Tenedor, Restaurant Guru, Gastroranking.es… Todas ellas os dan puntuaciones muy elevadas y los usuarios os valoran positivamente. ¿Qué es lo que gusta tanto a los clientes de Sutargi?
Nosotros intentamos hacer una cocina honesta que se refleje tanto en los platos que elaboramos como en los precios. Eso, precisamente, es algo que los clientes suelen agradecer y lo que hace que, en general, nos valoren positivamente.
¿Cuánta relevancia tiene el producto en el mundo de la gastronomía y en la enología?
El producto es muy importante, ya sea en un restaurante o hablando de enología. Una buena materia prima es la principal causante de que aparezcan los sabores auténticos.
No obstante, en ambos mundos, trabajar con un buen producto también requiere mucho trabajo previo de informarse sobre el mismo, cómo tratarlo, etcétera. En nuestro caso y hablando de cocina, en Ondarroa somos unos privilegiados por tener una tradición conservera de mucha calidad y, además, contamos con un puerto pesquero muy activo que nos abastece de pescado fresco.
La relación de Bodegas Ostatu con el restaurante Sutargi
¿Qué papel juega la bodega en el éxito de un restaurante como Sutargi Jatetxea?
Nosotros creemos que una buena comida necesita ir acompañada de un buen vino. En el maridaje entre ambos está la magia.
Sutargi cuenta con bar y restaurante y con una oferta diferenciada en cuanto al tipo de comida. ¿También es distinta la oferta y el consumo de vino?
Sí. Pensamos que debe de haber una diferenciación porque son dos conceptos distintos, pero en ambos espacios y ofertas queremos que prime la calidad del producto y a un buen precio.
¿Qué aportan los vinos de Bodegas Ostatu a la oferta gastronómica de Sutargi?
Ostatu es una bodega que nos aporta unos vinos excelentes en los cuales se aprecia el trabajo y la dedicación de toda la familia. Es algo que se refleja en que son vinos con carácter y con alma, lo que acaba haciendo que gusten mucho a los comensales.
¿Con qué vino maridaríais cada una de las secciones del menú de Sutargi Jatetxea?
- Entrantes: con un buen blanco fresco.
- Conservas: con un txakoli de Getaria.
- Revueltos y tortillas: con un Rioja Alavesa.
- Mariscos: con un ribeiro.
- Pescados: con txakoli vizcaíno, albariño o un cava.
- Carnes: un buen Ribera.
¿Y con cuál acompañaríais la famosa y premiada Merluza a la Ondarresa de Sutargi?
Sin duda, la Merluza a la Ondarresa la acompañaría con un buen blanco como es el Lore de Ostatu, que le va genial.