Por Mariasun Saénz de Samaniego Berganzo
Las fiestas de San Prudencio, el Santo “meón”, suponen el cierre de este atípico mes Abril, y este año las circunstancias, nos obligan a su celebración en el interior de nuestros hogares.
San Prudencio es una de nuestras fiestas favoritas, en una de la épocas mas bonitas del año, la primavera, donde la vida vuelve a nacer y los campos lucen un verde brillante, en la viña, la brotación no para, el temple de las temperaturas hace que vayan creciendo los brotes, empezando a enseñar los primeros apéndices de uvas. Son fechas claves para el desarrollo de nuestro viñedo, en el que una adversa climatología, puede dar al traste con una parte importante de la producción, no queda muy lejos la importante helada de 2017 en ese día de San Prudencio, por lo que crucemos los dedos y esperemos que el tiempo sea benévolo con nuestros viñedos.
Cuando hablamos de las Fiestas de San Prudencio, inevitablemente pensamos en su tradición gastronómica; los perretxikos, y los caracoles, que este año tendremos que disfrutar en nuestros hogares, en lugar de compartirlos con amigos y resto de la familia.
A pesar de las circunstancias, DISFRUTEMOS , CELEBREMOS, y BRINDEMOS con un buen vino de Rioja Alavesa, por la Salud de todos y por todos aquellos que ya no nos acompañan!
