La mayor conciencia social respecto a la sostenibilidad del medio ambiente también impregna el mundo de la enología. Desde Ostatu queremos hacer nuestra aportación a través de gestos cotidianos como la reducción del peso de las botellas, la iluminación por LED, la homogeneización del etiquetado y del embalaje o la sustitución de la caldera de gasóleo por una de biomasa.
De hecho, como hemos reflejado en nuestra página web, damos un paso más por la sostenibilidad en la enología colocando una instalación fotovoltaica de autoconsumo que supone una energía solar al año equivalente a 32.600 kwh. Dicha acción medioambiental nos permite reducir anualmente la emisión de CO2 a la atmósfera en 10.360 kg, lo que equivale a la plantación de 213,5 nuevos árboles.
Asimismo, y de la mano de la empresa Ekisolar y junto a la cooperativa de energías renovables GOIENER, en Ostatu nos mostramos actualmente como una bodega sensibilizada con el medio ambiente inscrita ya en ENEEK (Consejo Regulador de Producción y Alimentación Ecológica de Euskadi). Esta alianza es un gesto de compromiso de todo el equipo, donde compartimos una filosofía medioambiental basada sobre todo en la responsabilidad que supone dirigir y mantener día a día los viñedos y la bodega.
Sin embargo, el momento culmen en la relación entre la enología y la sostenibilidad en Ostatu es el año 2012. Fue entonces cuando, gracias al estudio de reducción y compensación de la huella de carbono, todas las acciones posteriores (como las citadas anteriormente) las enfocamos en potenciar la sostenibilidad en la enología.
De esta forma, iniciativas como la instalación fotovoltaica de autoconsumo que hemos citado anteriormente han posibilitado que Ostatu crezca concienciada para con el medio ambiente y se sitúe actualmente en plena vanguardia de la enología sostenible, al igual que muchas bodegas referentes en este aspecto de países como Holanda, Suecia o Noruega.
Enología y medio ambiente: a un paso del futuro
En esta misma línea, las bodegas de Rioja Alavesa en particular y de España en general, por el peso que tenemos en el sector debemos comprometernos con una producción sostenible. Somos el país con mayor número de viñedos y el tercer productor mundial, por la que la implicación con la enología y el medio ambiente se convierte en una obligación. De hecho, si hablamos de vino y sostenibilidad y según datos de FEV (Federación Española del Vino):
- Contamos con 70 Denominaciones de Origen y 42 indicaciones geográficas protegidas.
- Tenemos el mayor número de viñedos ecológicos del mundo, con 121.200 hectáreas (en 2020) los cuales producen más de 400 mil toneladas de uva de vinificación.
Con estas cifras, además de los datos económicos que genera el sector, mantener un producto sostenible que siga siendo atractivo es una obligación y un compromiso con la sociedad y con el medio ambiente.
Por eso, en Ostatu creemos que la técnica para hacer y ofrecer un buen vino no sólo ha de basarse en una buena elaboración, un correcto almacenaje, un minucioso análisis, la conservación y el embotellado. En el arte de producir vino también juega un papel clave la preservación de la naturaleza, algo de lo que somos totalmente conscientes y lo tenemos presente en cada uno de los pasos que conforman el proceso.
Ostatu reconocida por apostar por la viticultura y enología sostenible
Asimismo, en Ostatu la enología sostenible es ya una realidad gracias a pequeños cambios que hemos ido implementando. El uso de determinados fertilizantes, pesticidas y herbicidas no está prohibido en el reglamento como tal. No obstante, el algo que queda a juicio de cada uno y por eso la necesidad de que seamos responsables con el medio ambiente y, desde luego, con las propias tierras en las que se producen las uvas. El entorno de Rioja Alavesa, tan valorado, está muy concienciado con el impacto medioambiental de sus bodegas y cada vez implementa y desarrolla nuevas prácticas que, sin interferir en la calidad del vino, puedan, por ejemplo, evitar la aparición de sales tartáricas, tan nocivas para el entorno.
En nuestro caso, la pura esencia de Rioja Alavesa se refleja en toda la familia. En Bodegas Ostatu, desde hace años, aunamos la tradición con la preocupación por la sostenibilidad y el medio ambiente. Nos involucramos por el cuidado de la tierra y la materia orgánica, como demuestra el hecho de que ya en los años 80 elimináramos el uso de abonos químicos. Apostamos por una viticultura regenerativa ayer y hoy, puesto que va amoldándose a los nuevos tiempos.
Nuestro objetivo, además de elaborar buenos vinos, es el de garantizar un futuro sostenible para las nuevas generaciones y es aquí donde nace el proyecto “Viñadiversidad”. Una apuesta por llevar a cabo prácticas regenerativas, las cuales se están implementando paulatinamente para fomentar la biodiversidad y mejorar la estructura de los suelos de nuestros viñedos ubicados en Samaniego.
Pues bien, este proyecto ha sido galardonado en los Premios SOStenibilidad 2021, organizados por El Correo, Aclima y BBVA, y supone un merecido reconocimiento a tanto trabajo en plena transición ecológica sostenible, en la que, por supuesto, ganamos todos y todas. Y sí, lo mejor es que lo hemos hecho sin restar un ápice de sabor y calidad a cada copa de vino.